Con la asistencia de 350 mujeres integrantes de Grandes Logias de distintos países de Latinoamérica, la Masonería Femenina celebró el Solsticio de Invierno y de Verano, según la Región donde viven las Queridas Hermanas. Las Grandes Logias Femeninas de Chile, Argentina, Bolivia Uruguay, Venezuela y México se encuentran reunidas en la Federación Americana de Masonería Femenina, FAMAF.
El encuentro, una de las celebraciones más importantes de la Masonería, se realizó vía telemática y estuvo centrado en la reflexión sobre la transformación y mutación permanente del Ser Humano, de la Tierra, del Universo y de la Vida. El Solsticio de Invierno es periodo de siembra, de recogimiento interior y el Solsticio de Verano momento de cosecha, idea que los pueblos originarios tenían mucho más clara que la humanidad actual. El trabajo lo realizó la Logia Lalen Kuzë de Talca, Chile.
La reunión cerró con siete brindis al Sol, la Luna, Marte, Mercurio, Júpiter, Venus y Saturno, que Grecia y Roma antiguas denominaron con distintas virtudes y cualidades que los masones y masonas buscan relevar. Estuvieron a cargo de estos saludos las Grandes Maestras de los países asistentes.