La declaración de principios de la Gran Logia Femenina de Chile señala que: “es una institución iniciática, esencialmente humanista, filosófica y filantrópica, cuyo objetivo es lograr el perfeccionamiento de las mujeres que la conforman y a través de ellas el de la humanidad “.
Gran desafío para cada una de nosotras, las mujeres masonas, que con mazo y cincel desbastamos a diario nuestra piedra bruta para alcanzar nuestro perfeccionamiento en la construcción de nuestro templo interior para llegar a ser mejores personas, y desde ahí contribuir a la existencia de un mejor vivir, a través de nuestros postulados de Libertad, Igualdad y Fraternidad.
Esta tarea, no obstante, se vuelve que cada vez más difícil de lograr en estos tiempos en que el calentamiento global está causando estragos en gran parte del planeta, generando inundaciones, sequías, plagas, mala calidad del aire, y otros aspectos que afectan el estado de bienestar de sus habitantes.
Frente a este dilema, nosotras las mujeres de la Gran Logia Femenina de Chile, debemos admitir este fenómeno global y asumir en conciencia los efectos que está generando en el planeta y especialmente en nuestro país.
Por lo anterior, nuestra Gran Logia Femenina de Chile, creó la Comisión de Sustentabilidad y Medio Ambiente que tiene como propósito realizar en todas las logias de la obediencia acciones de sensibilización para comprender la magnitud de esta realidad que nos afecta y acciones concretas de mitigación, tales como, las orientadas a la disminución de la huella de carbono, y la huella hídrica en nuestras casas masónicas. De esta manera podremos cada una de nosotras, las masonas, tomar conciencia y transformarnos en agentes cambio frente a esta realidad.
