En el mundo hay 218 millones de niños y niñas entre 5 y 17 años que se encuentran ocupados en la producción económica según la Organización Internacional del Trabajo. De ellos, casi la mitad (152 millones) son víctimas del trabajo infantil y 73 millones se encuentran en situación de trabajo infantil peligroso. Las regiones de África y Asia y el Pacífico juntas, alcanzan la cifra de casi nueve de cada diez niños y niñas en situación de trabajo infantil en todo el mundo. La población restante se divide entre las Américas (11 millones), Europa y Asia Central (6 millones) y los Estados árabes (1 millón).
La extrema pobreza, orfandad, situaciones de abandono, sumado a la necesidad de “mano de obra barata” en los países en vías de desarrollo, han generado que nuestros niños y niñas pierdan sus derechos, asumiendo una vida adulta, que les niega educación, salud y una vida plena que le permita su desarrollo y bienestar integral.
De acuerdo a estudios realizados por la OCEC (Observatorio del Contexto Económico UDP), se estima que en nuestro país en el año 2020, un total de 76.747 NNA entre 5 a 14 años se encontraría en situación de trabajo infantil, aun cuando la Ley Nº20.189 promulgada el 15 de mayo del 2007 modificó el Código del Trabajo y prohibió la contratación de menores de 15 años. Se incluyó como requisito que los menores de 18 años acreditasen el término de su educación formal o estar cursándola y, en caso de estar estudiando, las labores no debían dificultar su asistencia a clases.
Frente a esta realidad, el año 2002, la Organización Internacional del Trabajo (OIT) instituyó el primer Día Mundial contra el Trabajo Infantil como forma de poner de manifiesto la gravísima situación de los niños y niñas que trabajan. Este día 12 de junio, tiene por objeto ejercer de catalizador para el creciente movimiento mundial contra el trabajo infantil.
El trabajo infantil es un hecho social que no debemos aceptar, frente al cual hay que luchar y concientizar, pues sus huellas, generan profundos daños en el desarrollo integral del niño la niña, limitando su derecho a vivir libremente.
En la lucha para erradicar el trabajo infantil a nivel mundial podemos marcar la diferencia, participando en las actividades y eventos contemplados en los «Compromisos de Acción 2023», aunando esfuerzos para la conformación de un movimiento global coordinado:
- Escribe a un decisor
- Recauda fondos destinados a una organización benéfica orientada a prevenir el trabajo infantil
- Apoya el comercio justo de tu localidad, beneficiando a niños, niñas y familias de escasos recursos
Por Celma Hernández Reuter, Corresponsal Logia Pelomtuwe Nº34 de Castro.