Llamó a relevar la tolerancia como un deber moral y político
Con un mensaje republicano al mundo masónico, el Gran Maestro de la Gran Logia de Chile, Sebastián Jans Pérez dio inicio a su período como máxima autoridad del gobierno simbólico de la GLCH por los próximos cuatro años.
Las celebraciones de instalación del Gran Maestro, comenzaron en el Salón de Plenarios del Congreso Nacional en Valparaíso el pasado domingo 29 de julio ante una gran cantidad de participantes, parlamentarios, el Alcalde de Valparaíso Jorge Sharp, bomberos de todas las compañías de Valparaíso, dignatarios de Masonerías extranjeras y organizaciones del mundo laico, así como representantes de la Masonería Femenina.
En la testera acompañaron al Gran Maestro, la Gran Maestra de la Gran Logia Femenina de Chile, Carmen Mardones Hauser; la Presidenta Nacional de la Asociación Nacional de Mujeres Laicas (Centros Femeninos), Evelyn Augsberger Bachmann; el Presidente de la Fraternidad Juvenil Alfa Pi Épsilon, Jean Pierre Miere, y el Soberano Gran Comendador del Supremo Consejo, Álvaro Pulgar Gallardo.
En la oportunidad el GM Sebastián Jans señaló que la República es el lugar de todos los ciudadanos debiéndose dejar de lado las conductas hegemónicas, respetando la libertad de conciencia de las personas. “La Masonería es una escuela de moral que busca el buen vivir y el buen convivir( …) que releva la tolerancia como un deber moral y político (…) ha llegado el momento de construir diálogos generosos entre todos”, enfatizó. Destacó además el derecho al trabajo de hombres y mujeres lo cual “permite una vida digna y libre”, señalando que es necesario sincerar las estadísticas puesto que la precarización del trabajo en el siglo XXI es una realidad.
El encuentro terminó con una presentación musical de la Orquesta Marga-Marga y con la inauguración de la exposición fotográfica “Valparaíso, cuna de la Masonería Chilena”, en el mismo Congreso. Acto seguido se dejaron ofrendas florales en homenaje a la Gran Logia de Chile ubicada en Av. Brasil 1800, frente a la casa Masónica del puerto –la primera del país– ocasión en la cual el Gran Maestro destacó el importante rol de los inmigrantes en la construcción de la República y de la GLCH.
Posteriormente en Santiago se celebró una gala musical en el Aula Magna de la Escuela de la Policía de Investigaciones, que destacó por la participación de músicos de gran calidad interpretativa en instrumentos como el piano, violín y marimba, masones provenientes de Santiago y también de regiones, como el cantautor “Chirigua” González de Curicó, que hizo reír a la audiencia con la picardía de sus letras masónicas.
