Q.·.H.·.M.·.Cecilia Soto Melo
Fecha: xx/xx/xxxx
Q.·.H.·.M.· Cecilia, ella era profesora de Educación Diferencial, la mayor parte de su vida profesional fue como directora de una Escuela Especial. En el corto tiempo que la conocimos mostró mucho compromiso, no sólo con nosotras, sino también con su escuela y su familia, compuesta de su esposo, 3 hijas y un nieto. Su esposo falleció un año antes que ella y pudimos apreciar el profundo amor que se tenían. A pesar de no tener mayor conocimiento de la masonería antes de llegar a nuestros Templos, hizo muy pronto suyos los postulados de la Orden
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ESTIMADOS FAMILIARES, AMIGOS TODOS
La Respetable Logia “Estrella del Sur N°10” del valle de Concepción, perteneciente a la Gran Logia Femenina de Chile, de la cual era miembro activa nuestra Querida Hermana Cecilia Soto Melo, se ha hecho presente en el valle de los Ángeles en este día en que nos recoge la consternación y el dolor. Nuestra querida hermana Cecilia ya no responde a nuestros llamados, nuestra Querida Hermana Cecilia ya no existe, estamos ante sus restos mortales. Los caminos que ella recorre ahora nos son desconocidos. Los caminos que ella recorrió junto a nosotras ya no la ven.
La conocimos un día 1° de Junio del año 2013, en el valle de concepción, el día de su iniciación, y aunque no la conocíamos anteriormente, en este corto periodo, la convivencia fraternal nos permitió conocer de ella, de su trayectoria de vida, saber de su entorno familiar, de sus deseos y aspiraciones, de su forma de encarar la vida y disfrutarla, del cariño y preocupación por sus hijas y también de su querido nieto, y hace muy poco tiempo, también supimos del profundo dolor que dejo la partida del compañero de toda su vida, su esposo. Y ahora, su propia partida.
Lazos fuertes y delicados nos unieron y crecieron en este corto tiempo, la inquietud por llegar a forjar sus aspiraciones y llegar a ser la constructora de su propio destino, la trajo hasta nuestros templos, aprendió con fervor de nuestra orden, así como nosotras aprendimos de ella, aprendimos de su compromiso y capacidad de trabajo, de su celo y su constancia, de su energía y gran voluntad, de su calidez y ternura, de su trato siempre fraterno y de su preocupación por el destino de la humanidad.
Querida Hermana Cecilia Soto Melo, has dejado un profundo dolor ante tu partida, dolor en tu familia y dolor en todos quienes tuvimos el privilegio de conocerte y compartir un poco de tu vida, nos dejas el consuelo de tu recuerdo y el ejemplo de tu fortaleza.
